Tal y como avanzamos en un post anterior, titulado "Gauguin y el viaje a lo exótico", el Museo Thyssen-Bornemisza tiene preparada, como uno de los platos fuertes para este otoño, la mencionada exposición, en la que de forma casi literal primero y puede que literal después, el visitante viaja rumbo a Tahití y las Islas Marquesas, y lo hace, siguiendo el mismo recorrido que el pintor realizara en su día.
Paloma Alarcó y Marta Ruiz del Arbol, comisarias de la exposición, visitaron in situ y gracias a la colaboración de las autoridades de Tahití, los lugares que Gauguin conoció y retrató, los caminos por los que se movió. En este viaje pudieron experimentar las sensaciones que él experimentó y reconocer en el paisaje los fondos que el artista utilizó en sus obras de esta etapa.
En el blog de la exposición, son ellas mismas las que relatan la aventura como si del diario de un antiguo explorador se tratara, para acercarnos aún más a la figura de Paul Gauguin y para de alguna manera, iniciarnos ya, antes incluso de llegar al museo, por el recorrido de la muestra. Una muestra en la que podrán verse los frutos de las exploraciones artísticas de Gauguin, Matisse, Kandinsky, Klee o Macke, entre otros, así como la impronta de Gauguin en los expresionistas alemanes y los fauves franceses, poniendo así de manifiesto cómo la figura de Gauguin se alza como el creador de un nuevo canon exótico que sirvió de arranque de los lenguajes de la modernidad de las primeras décadas del siglo XX.
Pero la experiencia sobre Gauguin que propone el Museo Thyssen-Bornemisza no termina aquí. A partir del 19 de octubre estará a la venta el Cuaderno de viaje. Tahití y Gauguin en el que proponen un recorrido gauguiniano por la Polinesia Francesa. Por otro lado, el Museo Thyssen-Bornemisza ofrece a los Amigos del Museo en su programa Viajar al cuadro, un viaje a Tahití y las Islas Marquesas para este otoño, guiados por Guillermo Solana, Director Artístico del Museo.
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